Durante el invierno es frecuente que disminuya el rendimiento de los animales. Es conveniente revisar los colchones térmicos, y sistemas de calefacción para asegurarse de que funcionan correctamente. Los termómetros a distancia pueden facilitar esta tarea. Es mejor realizar las reparaciones o substituciones antes de que lleguen los animales, mientras la nave está vacía.
El subministro de agua también debe revisarse. ¿Los bebederos proporcionan la cantidad suficiente de agua a los lechones y de un modo adecuado para ellos? ¿Ha probado otros sistemas, como la cazoleta o el chupete? Normalmente un lechón tarda varios días en adaptarse a los bebederos y durante este periodo en que bebe menos agua, consume menos pienso. Por otro lado, el agua desperdiciada se convierte en purín que debe ser tratado.
La sanidad es otro de los puntos clave. Una buena limpieza y desinfección entre lotes es indispensable. Es bueno comparar el estatus sanitario de los lechones que entran con el de los que salen. De forma rutinaria, los desinfectantes deben cambiarse un mínimo de dos veces al año. Hay que respetar las concentraciones, temperaturas y tiempo de espera hasta la entrada del siguiente lote especificadas por el fabricante.
E Barrie. 5 octubre de 2007. OMAFRA
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